,

¿Cómo debo cuidar de un gato con hipertensión arterial?

¿Cómo debo cuidar de un gato con hipertensión arterial?

Ya sabes que tu gato puede sufrir hipertensión arterial, ese “asesino silencioso” que va minando su salud sin apenas síntomas hasta que la situación ya es muy grave.

Al igual que ocurre en las personas, en los felinos domésticos una tensión arterial elevada por encima de las cifras normales produce daños en diferentes órganos: los ojos, los riñones, el corazón y el cerebro. Lo más peligroso es que los propietarios no podemos apreciar los síntomas hasta que los daños son muy serios: el gato se queda ciego repentinamente, desarrolla una insuficiencia renal o cardiaca graves o, incluso, sufre una hemorragia cerebral.

Recuerda que la única forma de prevenir las consecuencias de la hipertensión arterial sobre tu compañero felino es llevándolo al veterinario para que le haga revisiones periódicas, sobre todo si ya ha cumplido los siete años, que es cuando se empiezan a dar la mayor parte de casos de gatos con hipertensión. De esta forma la podréis detectar cuando esté en sus primeras fases y controlarla con una medicación adecuada.

Las claves para cuidar de un gato con hipertensión arterial

Para empezar, tienes que seguir las indicaciones que te dé el veterinario y, para eso, es necesario que las visitas sean frecuentes: cada tres o cada seis meses, más a menudo que la recomendación anual genérica para gatos sanos menores de siete años. El veterinario, además de detectar la hipertensión, investigará si tiene una causa que se pueda tratar, como hipertiroidismo por ejemplo; de esta forma, si la causa de la hipertensión arterial se puede curar, también se curará la hipertensión. ¡Fundamental! Si el veterinario prescribe una medicación, hay que seguir a pies juntillas el protocolo de administración.

Hay algo que ya se te ha ocurrido, seguro: debes evitarle a tu compañero felino situaciones estresantes. El estrés hace que suba la presión sanguínea y puede resultar muy peligroso para pacientes que ya sufren hipertensión. Pregunta a tu veterinario por productos que te ayuden en esta tarea de hacer que la vida de tu gato sea más tranquila, como Feliway.

Por otra parte, cuidar su alimentación es fundamental, en algunos casos, como medida de apoyo para el control de la hipertensión. Con frecuencia, junto con la hipertensión aparecen también problemas renales, consulta con el veterinario la dieta de prescripción que se ajusta más al estado de tu gato.

Otra cuestión que debes tener en cuenta es que un gato que hace ejercicio es un gato más sano. Pero ¡cuidado! No se puede pasar de 0 a 100 el primer día: un felino sedentario, que ha dejado de jugar y apenas se mueve, no puede empezar a hacer ejercicio como si fuese un cachorro. Es importante realizar revisiones de salud periódicas para descartar problemas físicos que puedan causar dolor y no achacarlo todo a la vejez. Ve poco a poco: proporciónale juguetes interesantes y variados, zonas de juego estimulantes, “pícalo” para que explore… Se irá poniendo en forma paulatinamente; no pienses que porque tu gato sea mayor ya no puede moverse con agilidad, los gatos son animales muy atléticos a todas las edades si se les da la posibilidad de ejercitarse.

¿Cómo debo cuidar de un gato con hipertensión arterial?

A los gatos con hipertensión hay que proporcionarles alimentación adecuada y estimularlos para que hagan ejercicio de forma suave y vaya mejorando su forma física.

Si quieres saber más acerca de la hipertensión arterial en gatos no olvides visitar la web de Amodeus y seguir sus consejos.

0 comentarios

Dejar un comentario

¿Quieres unirte a la conversación?
Siéntete libre de contribuir

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *