¿Crees que tu gato se siente feliz?
Las malas lenguas dicen que los gatos son seres distantes y poco afectivos, sin embargo, aquellos que conviven con gatos suelen tratar de corregir esta premisa tan alejada de la realidad. Un gato puede ser sociable y amistoso además de un gran amigo.
En este post queremos ayudaros a comprender un poco más a vuestro gato e identificar cuáles pueden ser algunas de las razones para su comportamiento y que, de esta manera, nos resulte más fácil poder comunicarnos adecuadamente con él o ella y revisar las necesidades y carencias en nuestra convivencia en casa.
Aprende a diferenciar los maullidos de tu gato y entender así lo que necesita.
Cada maullido de nuestro amigo felino puede significar algo diferente en función de cuándo y dónde ocurre. Es importante por ello conocerle bien para saber diferenciar cuando quiere jugar, cuando quiere que le prestes atención, cuando quiere comer o cuando quiere estar solo un rato.
Como cada gato es un mundo debemos prestar mucha atención a cada uno de manera individual y no dar por sentado que dos gatos del mismo hogar pueden querer lo mismo aunque estén maullando a la vez.
Ni todos los gatos ronronean, ni todos lo hacen por el mismo motivo.
Tratar de comprender los ronroneos de nuestro gato es otra de las tareas que debemos hacer. Aunque el ronroneo es una vocalización gatuna común en la mayoría de los felinos, no todos los gatos los emiten por el mismo motivo ni al mismo volumen ni en la misma cantidad.
Aunque muchos gatos ronronean para mostrar felicidad algunos podrían hacerlo al estar asustados o si se sienten enfermos. El ronroneo es algo que realizan para ellos mismos, para lograr sentirse más tranquilos.
Identifica qué intenta decirte tu gato cuando gruñe, sisea o se bufa.
Es por todos conocido que cuando un gato gruñe, sisea o está en pleno bufido (con los pelos erizados) no es buen momento para acercarnos o intentar acariciarlo para calmarlos. Si nos acercamos podemos asustarle más y podría llegar a atacarnos e, incluso, mordernos. Es mejor esperar a que se le pase el enfado antes de acercarnos a él o, incluso, intentar distraer su atención de aquello que le provoca esta conducta.
Cuando un gato muestra esa conducta puede significar miedo, enfado o ambas cosas.
Muy interesante.
Muchas gracias Ana. 🙂